lunes, 11 de noviembre de 2013

ANGELARRES (el 27 de Carteros atrabiliarios Dulces energúmenos/

 
 



El primer texto de el:

 libro III
//las angelarres//

 En el prado del ángel cabrío



desde: Carteros atrabiliarios Dulces energúmenos



ANGELARRES





27



Plumíferos o desplumados y ciertamente ojerosos
llegaron al ruedo los crípticos mensajes etéreos
como de cigarras: chicharreos y quejumbres
Astucias al tiempo arremolinan Espolones lumínicos y romas
Nostalgias para un destinatorio de risueños agolpan la prudencia
y olorosos de tanta transparencia suben la temperatura

Con permiso    cae la mirra con permiso
dejen pasar    con permiso    Las quejosas aventadas

Y guardan sus plumas necesarias y doradas
en ordenadas filas    Multicalores rumores en destierro
A medida que obscenisan las alas
y entregan sus rabos humeante /sus cachos incensarios
/caudales cuaternarias en ristre
/filortes /senos /curvas y procacidades otras
de concreción visibles    //Según imaginaran de modo concreto los mangakas//

Esperen turno No empuje A medida que el olor esparce
como carburos necesarios y en pigmentos del maligno
y también del buenigno
No salte la cola!

Y entran del lado de aquí /amurrados/
sus vacaciones desde los cotos de féminas sin velos
con hay tiempo y no apresure /se escucha/
dejando angelestiales parafernalias del lado allá
por si las moscas hiciesen sus agostos

Quedan desvanecidos-transparentes
tenues-derramados
espirituales-incorpóreos /apretujados/
en sus corrales de suspiros / bufidos penitenciales
nostalgias de promesas turgentes
y otros instrumentos del oficio


Y usted? Cómo se llama?
Yo?            No     Tú

Correspondientes a su esencia
de seres angelicosiosos en lucha permanente
con la aún más breve brisa leve
que cruza y entrecruza sus presencias en caos irreversible

Por favor     cierren la puerta Se viene abajo el oro

Y ya veréis que sí desprendiéronse
sus rabos /sus caricias //etéiricas//
deseos de marfil
cachos ecuménicos
ojos de cristal //enegrecido//
filortes solariegos
corazones de David
senos indulgentes
segundos sabáticos
plumas escribanas
pensamientos filisteos
curvas codiciadas
Katanas Cimitarras Ballestas
y otros considerandos de su condición desventurada
paridacial y en destierro

Con permiso     Con permiso
//la mirra condensa nauseabunda atracción oligofrénica//
No abra esa ventana!
Porque también sus ombligos han desaparecido

Dejen pasar     Con permiso
Y la brisa agita crípticos mensajes
//a ésa le haría el favor altiro//
Misterios descifrables
Como la secretiva fijación en las colitas
y pertenencias de una vida de prestado
Hagan cola
Esperen turno     No empuje

Y eran legiones Y eran jerarquías
Aunque bastante desordenadas las palabras ejercían
claves en los cueros / en las letanías
los hermosos desnudos / los transparentes espejos
A la convención de la contra-inteligencia-supina
en los rezos de tanta beata de fe y esperanza

Y él pensó     //caridad ciertamente//
 
Si todos muriéramos no quedaría ni uno de estos
Deliciosos turullos de aire enrarecido fijos en signos
El inicio cuneiforme y otras certidumbres

Terribles!    Poderos!    Abiertos!
//Me cago de la risa!// Como que imaginó que profería/
Pero se cuidó mucho en decir algo
no fuera traicionado por las letras y los murmullos
y los inciertos remordimientos de conciencia
y las ciertas calorías apreciando tanta hermosura
y tronos y coros y otras imaginativas realidades en despliegue